La pureza del diseño y el lujo en la sastrería se dan la mano para crear prendas que tienen como diálogo principal la elegancia, los volúmenes y materiales.


Gigi Hadid inauguró el desfile de Tod’s con un traje pantalón y un abrigo en estricto negro que reflejaban el objetivo del director creativo Walter Chiapponi de ofrecer un look elegante, pulido y severo para el otoño. Detrás de su inspiración para esta última colección, presentada hoy durante Milán Fashion Week, se encuentra el existencialismo y el impacto causado por las últimas semanas en el mundo, además de las consecuencias que aún se sienten por la pandemia.
Esto no quiere decir que las piezas fueran aburridas, la marca italiana presentó un desfile lleno de tejidos y telas ricas al tacto como a la vista. Las prendas fueron mostradas en layer on layer invitándonos a sentir el confort de cómo se sentirían en un día de invierno. Chiapponi también ofreció color: muchos tonos marrones que recuerdan una de las características principales de Tod’s: el cuero.
La silueta delgada de los años 90 contrastaba con abrigos, chamarras y capas exquisitamente elaboradas. La colección fue un re-diseño modernizado de los íconos de la belleza italiana. La pureza del diseño y el lujo en la sastrería se dan la mano para crear prendas que tienen como diálogo principal la elegancia, los volúmenes y materiales.
Entre mis looks favoritos se encuentran un traje sastre con falda en profundo negro a juego con una camisa blanca clásica. Me encantó el detalle del broche en el cuello y las botas estilo equitación. Otro conjunto que me enamoró fue un total look de cuero en tono camel de falda larga y blazer a juego. Hubo otros looks que desfilaron mucho más en el espectro cozy: unos pantalones baggy a juego con una teddy bear jacket así como un vestido de punto con cuello de tortuga combinado con una chamarra XXL que era una obra de arte del knitwear. Por último, me gustaron mucho los looks con trench coats y una capa de lana negra con flecos.


Chiapponi retomó el Di Bag que se hizo famoso por Lady Diana, se desestructura y se transforma para ser fácil de llevar en una maleta para la clientela que no para de viajar. El botín W.G. se reinventa con nuevas proporciones, mientras que los bolsos T Timeless tienen estructuras geométricas precisas. En definitiva, el diseñador ha estado perfeccionando un look específico para Tod’s y esta colección fue una de sus mejores, con un punto de vista claro y bien ejecutado. ¡Una de mis colecciones favoritas de MFW!
XO
Sira